Sabor a la VIDA.



Me gusta ahogarme en la música
y dejar que me lleve a su lugar mas preciado.
Me gusta los árboles y sus raíces
que siempre están para
absorber tus porquerías.


Me gusta el cielo y
sus nubes que hacen de
tu imaginación un infinito.
Me gusta la luna y sus
estrellas que me aconsejan
en noches de insomnio.

Me gusta el sol
y su claridad para
los buenos amaneceres.
Me gusta la brisa y la
lluvia en su mejor tiempo de
compañía y tristeza.

Me gusta el aire y su
silbido que te da eterno espíritu.
Me gusta usted que no sabe que existo.
Me gusta que nada
es para siempre,
pero para siempre eres tu.

Me gusta la mujer que
es el mayor arte y me
gusta la vida que es
un hermoso paseo.

Me gustan tantas cosas
que se me olvida mencionar...
Y no culpo a mi olvido
porque el ya me ha olvidado.

Como decir que me gusta mi ciudad
y la gente que hacen de ella severo prestigio.
De tantos gustos que saben a podrido.
Dejan mi boca un basurero
aun cepillandome tres veces al día.
Se que eso te ha dado risa
porque tal vez no me cepille...

Sigo sin descansar persiguiendo
mis gustos y abrazando los disgustos,
para que no hagan de mi un eterno castigo.
Tengo que ser tolerante en
esta tierra de flores y espinas,
bella y delirante.

Sigo caminando porque
estoy en mi mejor momento.
Canto y salto en días de aburrimiento,
voy a perderme en ese huerto
de esperanzas y alegrías,
de optimismo y voluntad,
de fuerza y plenitud...

¡Es un sabor tan placentero!
Ya que me espera la vida,
que aun me sigue sonriendo.

Richard Arellano






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